Este martes se cumplieron ocho años del terremoto del 27 de febrero, cuya magnitud fue de 8.8 grados en la escala sismológica de magnitud de momento (Mw). Su epicentro se ubicó en las costas chilenas frente a la Región del Biobío y trajo consigo un tsunami que azotó a las localidades costeras de la Séptima y Octava región.
Este fenómeno tuvo una duración de cuatro minutos y dejó un saldo de 525 fallecidos, cerca de 500 mil viviendas con daños graves y un total de 2 millones de damnificados. Una experiencia que se mantiene presente en la población chilena, por lo que varios expertos decidieron aportar desde distintas áreas para dar forma al libro: “Tsunamis en la Región del Biobío desde una mirada multidisciplinaria”, el que fue presentado por el historiador Alejandro Mihovilovich en el Auditorio San Lucas del Campus San Andrés.
Este texto, que fue editado por el académico e investigador de la UCSC, Rafael Aránguiz se distribuye en tres partes: la primera aborda aspectos culturales e históricos sobre los tsunamis, rescatando la sabiduría del pueblo mapuche en relación con los tsunamis. La segunda área corresponde a las ciencias de la tierra y la ingeniería, incorporando aspectos técnicos y físicos, respondiendo a la pregunta de por qué Chile es uno de los países más sísmicos del mundo. Finalmente, se hace un análisis frente al desarrollo de comunidades resilientes frente a los tsunamis, dando a conocer medidas que se han implementado en el país y en la Región posterior a un evento natural.
Así, el libro busca promover a la ciudad de Concepción como un polo de desarrollo de investigación en tsunamis, presentando su historia, crecimiento, y proyección futura bajo la influencia de estos fenómenos.
Nicolás Calbullanco, Nathalie Espinoza, Armando Cartes, Arturo Belmonte Pool, Jorge Quezada, Dante Figueroa, María Teresa Bull, Boris Sáez, Felipe García, María Teresa Rodríguez y Rafael Aránguiz fueron los encargados de dar forma a este libro que fue apoyado por la Editorial de la Casa de Estudios.
Sobre este proyecto, el editor, Rafael Aránguiz sostuvo que “para mí es una gran alegría porque de alguna manera plasma los resultados de las investigaciones de varios colegas de muchas áreas que son complementarias. Esperamos que sea un material que sea usado por estudiantes, profesionales y tomadores de decisiones que muchas veces no tienen toda la información”.
Aránguiz agregó que “es necesario dar a conocer a la sociedad lo que uno va descubriendo, que no quede solo en un paper en inglés. Cuando me fui dando cuenta de la riqueza que había en la zona sobre los tsunamis, la cultura, la historia, el desarrollo de la ciudad; me motivé mucho a plasmarlo en un documento”.
Finalmente, el académico manifestó su anhelo por escribir un nuevo texto, aunque esta vez relacionado con ingeniería de tsunamis donde se aborden aspectos del diseño. “Hace poco nos hemos dado cuenta que los proyectos costeros están requiriendo estudios de tsunamis y no hay normativas al respecto, por lo que la idea es trabajar sobre esos temas”, concluyó el investigador.